La Cronodieta te ofrece comidas variadas y sabrosas con las que te saciarás al tiempo que disfrutarás sin sufrir las frustraciones de una dieta. Un consejo: si te entrara mucha hambre entre las comidas, antes de comer nada, bébete un vaso de agua o de té sin azúcar. Esto ayuda: garantizado.
Los alimentos ideales para empezar el día son cualquier clase de muesli, pero sin leche ni yogur, para evitar las proteínas por la mañana. El yogur de soja o la leche de arroz pueden tomarse sin problema. Otra alternativa es tomar 50 ml de nata diluida en 150 ml de agua. Puedes añadirle frutas si las mezclas con una pequeña porción de buen aceite. Otros alimentos adecuados para ingerir por la mañana son: bollos, cruasanes, pancakes, tortitas de patata y cereales sin azúcar.
Pero si prefieres algo salado, puedes recurrir a las cremas de untar vegetales, como las de aguacate o boniato, y a verdura fresca, como los tomates. Además, los últimos estudios han demostrado que el desayuno es la comida más importante del día: no solo para producir energía, sino también para marcar el ritmo del día. No es casualidad que lo llamemos «desayuno» (o «breakfast» en inglés), lo que literalmente significa «romper el ayuno», ya que es la comida que acaba con el tiempo sin comer.
Sugerencias:
- Muesli de chocolate con plátano
- Cruasán o pan de leche con mermelada
- Batidos
- Tostada de pan con tomate o crema de untar vegetal
Durante el almuerzo puedes comer lo que te apetezca, evitando los excesos: sopa, carne, estofado, pasta de todo tipo, arroces y platos a base de patatas. Así tendrás energía suficiente para la segunda mitad del día.
Sugerencias:
- Sopa de calabaza y zanahorias
- Ensalada con tiras de pavo
- Sopa de col con tocino
- Risotto de setas
- Espaguetis a la carbonara
- Patatas rellenas al horno
No tomes ningún tipo de hidrato de carbono por la tarde, como patatas, pasta o pan. En vez de eso, ingiere carne, pescado, huevos, productos lácteos y verdura o sopas ligeras.
Sugerencias:
- Sopa de brócoli
- Sopa de lentejas
- Tortilla de calabacín
- Espaguetis de verdura
- Pescado a la plancha o al vapor con verdura
- Medallones de cerdo
No olvides cumplir el plan horario: desayuno – cuatro-cinco horas de ayuno – almuerzo – cuatro-cinco horas de ayuno – cena – 12-16 horas de ayuno.
Y otro consejo: cualquier comienzo es mejor que ninguno. Así que, aunque al principio solo puedas aguantar una o dos veces a la semana este nuevo concepto de alimentación, siempre será un primer paso. ¡Y mucho mejor que no haber dado ninguno! Rápido notarás lo bien que te sientes y no te costará nada adaptar tu alimentación a los principios de la Cronodieta.